Un estudio fenomenológico descriptivo del docente digital del siglo XXI: Sé el profesor que quieres tener

Abstract

En el siglo 21 la innovación educativa requiere el uso de tecnologías del aprendizaje para implementar prácticas específicas que optimicen los procesos de enseñanza y aprendizaje en distintos contextos educativos. La pandemia de COVID-19 resaltó las desigualdades y brechas digitales en la educación, obligando a una transición forzada hacia la educación a distancia. Las competencias digitales son esenciales para resolver problemas, gestionar información y crear contenido educativo eficaz. Las Tecnologías para el Empoderamiento y la Participación (TEP) promueven la cohesión social y el aprendizaje participativo, pero también revelaron la necesidad de enfoques más humanos y personalizados en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Esta investigación fenomenológica descriptiva, con un diseño mixto, exploró la experiencia de 5 docentes y 11 estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, sobre la educación a distancia durante y después de la pandemia. Se utilizaron entrevistas semiestructuradas y cuestionarios para recolectar datos, analizados mediante el método modificado de Stevick–Colaizzi–Keen de Moustakas (1994). Los hallazgos revelaron desafíos importantes, como la integración tecnológica, la necesidad de capacitación continua y las inequidades en el acceso a recursos. A pesar de estos retos, los docentes identificaron competencias digitales clave y estrategias de apoyo institucional, mientras que los estudiantes valoraron la flexibilidad del aprendizaje en línea, aunque enfrentaron dificultades derivadas de la brecha digital. Como parte de los resultados de esta investigación, he desarrollado el concepto de Tecnologías para la Inspiración y la Humanización del Aprendizaje (TIHA). Este concepto representa una evolución conceptual y práctica que trasciende enfoques anteriores como las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), las Tecnologías para la Relación, la Información y la Comunicación (TRIC), las Tecnologías para el Empoderamiento y la Participación (TEP) y las Tecnologías para la Investigación y Publicación (TIP). TIHA marca un nuevo paradigma en el proceso de enseñanza-aprendizaje, integrando la relación humana con la empatía, la inspiración y el bienestar emocional. Este enfoque transforma la manera en que se utiliza la tecnología, convirtiéndola en un medio para conectar emocionalmente, adaptar el aprendizaje a las necesidades individuales e inspirar experiencias educativas más significativas y humanas. TIHA redefine el uso de la tecnología educativa al priorizar el bienestar emocional y la personalización del aprendizaje. Este enfoque busca mejorar las competencias digitales de los docentes e inspirar a los estudiantes, promoviendo un aprendizaje inclusivo, accesible y profundamente humanizado. La tecnología deja de ser solo una herramienta para transmitir conocimiento y se convierte en un motor que fomenta la conexión, la empatía y el aprendizaje trascendental. Este estudio no solo resalta la importancia de las competencias digitales, sino que también propone un camino hacia un aprendizaje profundamente humano, transformando el rol de la tecnología en la educación del siglo XXI.