Relectura heideggeriana del libro X de las Confesiones de Agustín

Abstract

Los problemas que han surgido con respecto a la estructura general de las Confesiones de Agustín de Hipona (354-430) son muchos, y muchos de ellos están relacionados con la perspectiva del ideal convencional de la conversión; perspectiva en la que históricamente ha sido leída la obra. El libro X se ha visto especialmente afectado por esos problemas; unos lo consideran como complemento del proyecto original de Agustín, otros un añadido posterior a ese proyecto; nosotros, abandonando esa perspectiva histórica, lo consideramos como el articulador de la totalidad de la obra. Nuestra relectura del libro X la realizamos a partir de la interpretación fenomenológica que de dicho libro realiza Martín Heidegger (1889-1976) en su curso Agustín y el neoplatonismo, insistiendo especialmente en el concepto "inquietud". La investigación la dividimos en tres capítulos: en el primero (El problema de la estructura de las Confesiones) exponemos algunos elementos generales sobre la obra, la problemática específica con respecto al libro X, y nuestra propuesta como articulador de la obra. En el segundo capítulo (El joven Heidegger y la vida fáctica) realizamos una exposición general de la filosofía del "joven Heidegger'', insistiendo en los conceptos claves que utilizaremos en nuestra relectura, especialmente "vida fáctica", "Ser-en-el-mundo", "cuidado", "destrucción fenomenológica". En el tercer capítulo ("La experiencia fáctica de la vida" agustiniana y su distorsión) exponemos las tesis de Heidegger sobre la distorsión que Agustín realiza en el análisis de su vida presente; este capítulo lo dividimos en cuatro partes: en la primera (El porqué del confiten) exponemos las razones del confesarse de Agustín; en la segunda (la memoria como medio para alcanzar a Dios) describimos la adaptación que Agustín realiza del neoplatonismo al cristianismo, que es para Heidegger la causa de la distorsión del análisis de su vida; en la tercera (El "estar inquieto" como carácter fundamental de la vida fáctica) se describe a la inquietud que caracteriza a la vida que Heidegger llama fáctica; y en la cuarta parte (El "des encubrimiento" de la problematicidad de la vida fáctica) se realiza un ejercicio de destrucción fenomenológica para recuperar lo propio de esa vida fáctica: la problematicidad.